El reconocido experto Andrés Méndez, exmiembro del INTA y actual Director de Innovación del Ministerio de Agricultura, destaca que la tecnología agrícola se potencia cuando se comparte.
Andrés Méndez ha estado ligado de manera profesional a la tecnología agrícola desde sus comienzos como ingeniero agrónomo. Apasionado por la mecanización agrícola y la agricultura de precisión, su labor como investigador y extensionista en el INTA lo convirtió en referente nacional en la materia.
En la actualidad, desarrolla su labor, vinculada a las nuevas herramientas digitales para el sector agropecuario, en el Ministerio de Agricultura de la Nación, donde ocupa el cargo de Director de Innovación Tecnológica y Buenas Prácticas Agrícolas (BPA).
“Es importante mencionar que las AgTech para el sector agrícola y ganadero son y serán herramientas que permitirán que todo el sistema incremente su competitividad global, brindando agregado de valor en todos los eslabones”, introduce Méndez.
Y agrega que “las nuevas tecnologías de agricultura aplicada nos permitirán diferenciarnos como país, como ha ocurrido hasta el momento con otras tecnologías como la siembra directa y las maquinarias que permiten que este sistema funcione correctamente”.
La clave: compatibilidad entre las soluciones Agtech
El especialista está convencido de que hay mucho aún por trabajar en la difusión de estas tecnologías agrícolas, debido a que todavía hay quienes afirman que no tienen una aplicación cuantificable. “Pero, en realidad, normalmente el tema es que los usuarios no terminan de comprender su utilización”, dice.
Agrega que, “en cambio, hay muchos que ya ven el impacto de las AgTech en el sector y, por lo tanto, les resulta más sencillo visualizar las innovaciones que se vienen, como así también los cambios de paradigmas que deberá afrontar el sector”, sostiene.
Méndez comparte la definición de AgTech planteada por el movimiento CREA y el Instituto Interdisciplinario de Economía Política (IIEP), que las consideran como aquellas empresas que proveen servicios intensivos en conocimiento, basados en tecnologías agrícolas digitales para las diversas etapas de las cadenas agroalimentarias: desde la producción a campo hasta las fases de industrialización, logística y comercialización.
En esta dimensión AgTech, hay soluciones de tecnología agrícola como FieldView, que trabajan intensamente en la integración de plataformas para la toma de decisiones. “Hay empresas que han desarrollado herramientas con la intención de compartir datos. Esa va a ser la salida, porque, de lo contrario, va a pasar lo mismo que cuando salieron los monitores de rendimiento, que no se adoptaban porque no eran compatibles con el resto de las cosas”, analiza Méndez.
El experto admite que algunos piensan que la utilización de tecnologías agrícolas aisladas puede impulsar una mejora de toda la cadena productiva. “Es muy común escuchar que un software determinado de aplicación en la agricultura o una herramienta específica permitirá que el productor, contratista o industrial, tenga réditos instantáneos y lo haga ser altamente rentable”, dice.
Pero, por el contrario, él considera que “es cierto que un software agropecuario o en algunos casos una AgTech puede ayudar a mejorar el sistema, pero no creo que haya una única herramienta salvadora”.
Ecosistemas de tecnología agrícola
A partir de esta necesidad de hacer que las herramientas de agricultura digital sean vistas como un todo para la toma de decisiones, la conformación de ecosistemas es el camino que Méndez cree que hay que tomar para llegar cada vez más al productor.
Por eso, el esquema de trabajo desarrollado en la Dirección de Innovación Tecnológica tiene en cuenta tres líneas básicas:
- los ecosistemas de tecnología agrícola para solucionar problemas,
- los que pueden mejorar la competitividad de ciertas actividades,
- los que ayudan a pensar el mediano y largo plazo.
“En los tres la metodología es similar y consiste en vincular a las AgTech con las necesidades que existen. Ahora, estamos realizando reuniones de manera virtual, convocando a las startups a participar en una jornada de trabajo para que cada una cuente qué hace y porqué”, sostiene el reconocido especialista.
En definitiva, está convencido de que todas estas tecnologías de datos se potencian al interactuar. Así, incluso van mejorando cada vez más sus funcionalidades, aportando soluciones de eficiencia creciente para que la agricultura digital pueda ser no solo más productiva, sino también, y al mismo tiempo, cada vez más sustentable.