Genética y FieldView para enfrentar a la sequía en Argentina

Por Equipo FieldView el 07/04/2022 16:21:31

Alejandro Salaberry, asesor en el centro de Córdoba, se apoyó en la agricultura digital y en híbridos estables para obtener muy buenos rindes a pesar de la compleja sequía en Argentina. 

Alejandro Salaberry, ingeniero agrónomo y asesor en el centro de Córdoba , analizando datos en un lote de maíz

La campaña de granos gruesos 2021/22 volvió a marcar un ciclo de sequía en la Argentina para los cultivos de verano. Y la nueva temporada agrícola que se inicia, la 2022/23, también estará afectada por “La Niña”, el evento climático que provoca precipitaciones por debajo del promedio. 

Pero esta campaña seca, que estaba pronosticada por los climatólogos, también brindó una oportunidad a los productores y técnicos para hacer una planificación agronómica ajustada y aprender hacia el futuro. 

Es lo que hizo, en la localidad de Arroyo Cabral, a 15 kilómetros de Villa María (Córdoba), el ingeniero agrónomo Alejandro Salaberry, quien tomó varias decisiones juntas para amortiguar el impacto del fenómeno.

Salaberry trabaja con productores de forma independiente y también integra el equipo de la empresa "Cultivar", en Villa María, del canal de distribución Selecta, de Bayer. Con esa experiencia y respaldo, eligió apoyarse en la genética y en la tecnología para enfrentar la falta de lluvias que se pronosticaba. 

"La propuesta fue apostar, por un lado, a la genética estable de un híbrido de La Tijereta y, por otro, incorporar toda la información y datos surgidos de la campaña agrícola a una plataforma como FieldView", introduce.

La decisión de Salaberry hizo la diferencia en los momentos clave, sobre todo en el caso de agricultores que aplicaban baja tecnología. 

"En esta zona, hay maquinaria con herramientas tecnológicas estándar, pero muchas no se utilizan. Por eso es importante que los productores conozcan más sobre las soluciones disponibles, sus funcionalidades y sus beneficios", afirma. 

Mapa de híbridos utilizados en los ensayos en esta campaña de sequía en Argentina

Junto con la tecnología digital que aportó FieldView, otra de las piezas técnicas que encajó perfecto con la planificación de Salaberry fue la siembra de un híbrido con genética probada. 

Venía ensayando, durante varias campañas, el híbrido de LT 723 VT3 PRO, de La Tijereta. Este material, gracias a su estabilidad en los años complicados, pero también con excelente performance en las campañas promedio, podía combinarse muy bien con el manejo preciso que aportaba FieldView, pensó. 

El uso de la herramienta digital

Entonces, en esta campaña seca, Salaberry usó por primera vez la tecnología de FieldView para seguir tres lotes sembrados con híbridos de La Tijereta: en uno de los campos que asesora manejó 60 hectáreas con el ya mencionado LT 723 VT3 PRO, mientras que tuvo otros dos con LT 722 VT3 PRO.

Como no había información previa y la maquinaria no estaba adaptada para las aplicaciones variables, estos lotes fueron manejados en principio con densidad y fertilización fija. 

“Pero fuimos variando todas las densidades de maíz de manera manual, aprovechando una posibilidad que permite FieldView, retocando cantidad de semillas por metro en ambientes que sabemos que son más restrictivos y delimitando, también, los cambios de híbridos en el campo”, explica.

Así, sembró en un campo cinco materiales diferentes, ajustados cada uno de acuerdo al ambiente. Desde FieldView, colaboró con él Lucas Dellamaggiore, un verdadero especialista.

Alejandro Salaberry y Lucas Dellamaggiore en el lote de maíz

La plataforma se usó también para el monitoreo del cultivo, incluso para comparar con algunos testigos. En el caso puntual del LT 723 VT3 PRO, se sembró con otro material adyacente y gracias a la plataforma se pudo tener un excelente comparativo de toda la campaña.

En particular, FieldView también ayudó a cuidar el agua para los cultivos. En concreto, permitió hacer un seguimiento de un manchón de malezas que quedó en el lote por una falla de aplicación de los herbicidas y que, obviamente, estaba consumiendo recursos hídricos que en este año fueron escasos.

“Los productores medianos, que tienen maquinaria, tienen que comenzar a ver los resultados claros de utilizar estas nuevas tecnologías, para poder adoptarla”, dice Salaberry. Según el asesor, el momento bisagra será a partir de la cosecha, cuando todo esto se ratificará en kilos por hectárea.

“Muchas cosechadoras tienen monitor de rendimiento, pero no se baja ninguna información porque no se maneja ninguna plataforma, ni las gratuitas. Por eso, con muchos clientes estamos iniciando el mapeo de todos los lotes de cosecha, para luego ir procesando los datos”, adelanta. 

La sequía en Argentina y la genética

Otro de los aspectos que marcó la diferencia en Arroyo Cabral fueron los híbridos de punta. Esa dupla, genética y agricultura digital, fue clave.

El LT 723 VT3 PRO se sembró en la primera semana de octubre. “Desde ahí hasta mediados de diciembre llovieron 300 milímetros. Pero luego, hasta mediados de febrero, casi no se registraron precipitaciones y hubo 15 días de temperaturas de 40° con vientos fuertes”, detalla.

Buenos resultados del maíz a pesar de la campaña seca

El maíz llegó a floración, su período crítico, para la navidad, con lo cual tuvo la disponibilidad hídrica adecuada solo en la primera mitad del ciclo.

Pero, como explica Salaberry, por las características estables del material, y por haberlo sembrado en los ambientes y con la densidad apropiada, el cultivo consiguió obtener la mayor cantidad de reservas de hojas y tallo para dirigirlos hacia la espiga. 

“Eso lo comprobamos también gracias a FieldView, ya que allí vimos claramente que el LT 723 VT3PRO siempre tuvo mejor índice verde que el lote vecino que usamos como testigo”, relató. 

Así, se llega a la trilla con una expectativa de rinde de 80 qq/ha, muy cerca de la media de la zona para años normales.  Y con una experiencia a cuestas que ya convenció al productor de repetir los dos híbridos más rendidores el año que viene, por supuesto apalancados en todas las prestaciones de FieldView.

Alejandro Salaberry analizando los datos obtenidos en FieldView

El impacto de la sequía en la Argentina fue duro este año, pero permite sacar conclusiones interesantes. Por ejemplo, la fuerza que tiene la combinación entre la tecnología digital y la genética adaptada. Juntas ayudan a ponerle un piso a la producción ante escenarios realmente complicados. ©

 

Conocer los planes

 

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